jueves, 14 de agosto de 2008

Es el chino latino!

Últimamente tengo sueños muy, extremadamente, raros. Hasta debo admitir que extraño a los chinos. Me desperté con el horrible recuerdo de ver a mi mamá inyectándose heroína junto con una ex compañera del colegio secundario que no veo hace aproximadamente dos años. ¿Quién soñó alguna vez con su madre y la heroína? Nadie. Ni Janis Joplin hubiese soñado eso.
Estábamos todos en una cama matrimonial, blanca, sábanas blancas, almohadas blancas. Y ella... con la mirada ida, los ojos como vueltos hacia atrás, y yo cerrando frasquitos de pastillas.
Otro día, de la misma semana, suena el despertador y abro los ojos con una extrañeza absoluta. ¿Soñé que yo no era yo, aunque era yo en conciencia y alma si se quiere, escapándome de un travesti? Yo en otro cuerpo, lo invitaba al travesti a un hotel muy lujoso, y cuando llegábamos al cuarto le ponía unas gotitas de algún líquido somnífero. Brindamos, y tomamos. El travesti cae desmayado y yo me voy de la habitación. Recuerdo que alguien me dijo una vez que no te dejan salir solo de un albergue transitorio, entonces cambio la estrategia, hago que voy al baño, mientras la recepcionista está haciendo otra cosa, y salgo a la calle. (Eso fue medio consciente, ¿no?). Y mi auto, un Suzuki Fun plateado (oh, casualidad), me esperaba junto al cordón de la vereda.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

De donde salió este muchacho asiático? jajaj.
Garita, vos soñás con trabas?
Ruso.

Hombre polietileno dijo...

Y lo peor es que lo pasan en Sony!